¿Qué es el TDAH?
La doctora Orjales describe al niño con TDAH como:
[…] un niño o una niña impulsivo, despistado, al que mantenerse concentrado un tiempo prolongado requiere mucho esfuerzo y desgaste, emocionalmente dependiente del entorno, cariñoso, noble, con mucha menos picardía de lo que se espera para su edad, con una importante inmadurez emocional y de autocontrol. En ocasiones, además, muy inquieto y movido; en otras, excesivamente lento, hipoactivo y pasivo.
Recuperado de: http://www.tdahcantabria.es/isabelOrjales.html
El Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad, mejor conocido como TDAH; es uno de los motivos de consulta más frecuentes por lo que los niños son referidos con un psicólogo infantil, paidopsiquiatra o neuropediatra. Por lo general, los padres desconocen que su hijo pudiera tener dicha condición de vida que interfiere en su desarrollo socio-adaptativo tanto en casa como en la escuela.
Por lo tanto, durante la primera entrevista con el Psicólogo Infantil los padres describen el comportamiento negativo del niño mediante adjetivos calificativos como
“Es un niño distraído, flojo, travieso, respondón, no obedece, inmaduro, etc…”.
Algunos padres y maestros aún dudan que dichas dificultades, en ciertos casos se deba a una condición del neurodesarrollo, dado al elevado número de niños que lo presentan, por lo tanto, llegan a pensar que se trata de una moda.
No obstante, la especialista Orjales, refiere que el Trastorno por déficit con hiperactividad (TDAH) es uno de los trastornos psicopatológicos infantiles más estudiado en los últimos diez años (2000, P.71).
Por ende, es importante mencionar que los hallazgos en cuanto a la condición del TDAH señalan que radica en la inmadurez del Lóbulo Frontal donde las Funciones Ejecutivas son llevadas a cabo. Las cuales asumen la función de coordinar la memoria, la atención, fluidez verbal, interacción social, regulación emocional y flexibilidad mental.
¿El TDAH puede presentarse con síntomas asociados a otros diagnósticos?
En definitiva, es tema de gran controversia tanto para el ámbito de especialistas como escolar. Por lo tanto, es de suma importancia que también los padres cuenten con información acerca de dicha condición y sus comorbilidades. (El termino comorbilidades se refiere a otros trastornos que coexisten o asociados con el diagnóstico primario, en este caso con el TDAH).
Por consiguiente, algunos niños con TDAH pueden presentar trastorno específico de lenguaje, trastorno de ansiedad, trastorno negativista – desafiante y/o algún trastorno específico del aprendizaje.
Por lo tanto, a diferencia de lo que se cree, el TDAH no es fácil de diagnosticar, justamente por dichas vicisitudes que nos podemos encontrar en el cuadro conductual del niño.
Es trascendental en el desarrollo integral del niño que se identifique de manera precoz si existe una condición acompañante, puesto que de no ser así, todos los esfuerzos en cuanto al tratamiento serán insuficientes.
¿Cuál es la relación entre el TDAH y el Coeficiente Intelectual?
Por otro lado, hay niños con TDAH y un coeficiente intelectual por arriba de la capacidad promedio de niños de la misma edad, y en consecuencia, se imprimen características particulares en el desarrollo y evolución del trastorno.
Ante ésta coocurrencia denominada doble excepcionalidad el niño con TDAH y Altas Capacidades suele pasar desapercibido puesto que lo que más se exhibe son las conductas disfuncionales.
Sin embargo, dichas conductas no son exclusivas del niño con TDAH.
Últimamente, en mi práctica profesional ha sido el caso de varios niños, donde los padres se muestran muy confundidos porque su niño manifiesta características que se contrapuntean con el diagnóstico de TDAH.
En algunos casos, efectivamente no es un niño con TDAH, sino que con una disincronía en el desarrollo generada por las Altas Capacidades. Es decir, donde el nivel de desarrollo cognitivo discrepa de las habilidades socio- adaptativas.
Y en otros, efectivamente los diagnósticos coexisten pero aún así resulta confuso tanto para los padres como para los maestros debido a que no se logra un avance significativo.
Generalmente, dicha confusión les lleva a platearse que podría deberse a una instrucción tanto escolar como de crianza inadecuada a las necesidades del niño. Y en efecto, es un área valiosa para el progreso.
Mi hijo esta diagnosticado: ¿Qué hacer si tengo dudas?
La falta de conocimiento entre los maestros y padres e incluso de los profesionales como psicólogos, pediatras y paidopsiquiatras sobre las características clínicas y conductuales de otros trastornos psicopatológicos compartidas con el TDAH pueden ocasionar que se incurra en un falso diagnóstico.
Por lo tanto, es de suma importancia consultar a un psicólogo infantil especializado en diagnosticar trastornos del neurodesarrollo en la infancia, un neuropsicologo infantil o neuropediatra.
El que sean profesionales especializados en la infancia es elemental para un diagnóstico certero y un tratamiento eficaz.
La infancia es una etapa determinante en el desarrollo integral de un individuo y por ende, del éxito en su inserción social en etapas posteriores de la vida.
Psic. Infantil Juliana Mancillas
Licenciada en Psicología Infantil por Cetys Universidad, Tijuana. Especialidad en Trastornos del Neurodesarrollo. Ocho años de experiencia en Consulta Privada a Padres y Maestros. Actualmente, coordinadora de Dpto. Psicopedagógico en una Institución Educativa Privada.
Hola tiene todo de cierto
Lo que describes pues mi hijo tenia mal diagnóstico (autismo) cabe mencionar que tiene algunos rasgos y fue difícil dar con este diagnóstico pues también tiene un desfase de edad de 3 años, me pareció muy interesante a pesar que ya tiene un diagnóstico, siempre me gusta leer más y saber cosas sobre el tema ya que maestr@s aun se cierran a que el diagnóstico debe ser presentado por igual en todos los niños, siendo que cada cabeza es un mundo con o sin diagnóstico del TDAH